Ido con el viento (parte 1)
Imagen de พงษ์ดนัย ทองเกษม en Pixabay Por Gonzalo Figueroa Cea Cuando mi imaginación vuela casi no tiene límites. Allí están también los recuerdos: se filtran allí muy a menudo y con facilidad, pero como fragmentos que trato de reinterpretar. Gracias a mi mente busco, conforme a la lógica, las relaciones entre las situaciones pasadas, las uno y, así, logro "recomponer" lo que fue. Y eso, de por sí, también es imaginación pura. Entre esas filtraciones que a veces irrumpen en mi mente acerca del pasado propio bien pasado, aparecen en escena las caminatas de ida y de vuelta entre la casa y el liceo. Se trata de un regreso al pretérito que no requiere de máquinas del tiempo estilo Delorean ni de la ayuda de H. G. Wells al describirlo. No es la primera vez que me ocurre. Puede trasladarme a 1988, 1989 ó 1990...por ahí. En lo concreto es la época en que lucho por definirme entre mis predilecciones todavía adolescentes y la gravedad de las responsabilidaes adultas en su fase ...